Hay un libro del que hacía tiempo que quería hablar por aquí: La Historia con Playmobil, de Richard Unglik. Editado por SM, el libro repasa la historia de la humanidad con magníficas fotos de los distintos episodios históricos realizadas con Playmobil. Una manera ingeniosa y simpática de divulgar la enseñanza de historia. Lo recomiendo además de por la calidad de sus fotos por las ideas que sugiere para dioramas:
Una particularidad de Unglik es que recreó escenas con las piezas de las que disponía por aquel entonces (creo que es de hace 12 años o por ahí). Por ejemplo, en la escena de la que quiero hablar, la rendición de Vercingetorix, usó la única figura de romano que había salido hasta entonces: el special 4560.
Como se puede observar todavía no había ni vexilum (estandartes) ni coronas de laurel ni la piel de león del vexilarius, pero Unglik lo recrea todo con las piezas disponibles y con magníficos resultados.
Aquí mi versión de la rendición del jefe galo Vercingetorix ante Julio César tras la batalla de Alesia (52 a.C.):
El valiente jefe que había unido a las tribus galas entrega sus armas al invencible cónsul romano. La escena aparece en tres aventuras de Astérix, recordada por el narrador o bien por el propio César. Esta concretamente pertenece a El escudo arverno:
Vercingetorix fue hecho prisionero y llevado a Roma para ser exhibido en el desfile triunfal de César. Más tarde murió en la cárcel del Tullianum, posiblemente asesinado. Para los franceses Vercingetorix es un héroe nacional y el nacionalismo del siglo XIX se encargó de promocionar su figura, lo mismo que Viriato para España y Portugal.
Por fin le he encontrado uso al César de la 5394. Cambiándole la peluca por una más canosa tenemos al cónsul que conquistó la Galia ¿Toda...?
Las armas de Vercingetorix pasarán a formar parte de los trofeos de guerra de César. El escudo del jefe galo traerá de cabeza a Astérix y Obélix...
Agradezco a Juan Antonio Moscoso la idea que me aconsejó de incorporar el bastón de La ronda de noche a las legiones romanas:
¡POR TUTATIS!
Un aspecto muy interesante el de los caudillos bárbaros que fueron idealizados durante el siglo XIX al abrigo del resurgir de los nacionalismos. Vercingetorix ha quedado como uno de los primeros “franceses” ilustres. Nada más lejos de la realidad, salvo porque consiguió unificar temporalmente una serie de tribus y clanes que vivieron hace siglos en parte de lo que hoy es Francia. “Toda la Galia está dividida en tres partes, de las cuales una habitan los belgas, otra los aquitanos y la tercera los que en su propia lengua se llaman celtas y en la nuestra galos. Todos estos se diferencian entre si en la lengua, las costumbres y las leyes”.
ResponderEliminarEs un periodo muy interesante, me parece absolutamente maravilloso el planteamiento de Julio Cesar de cercar la fortaleza de Alesia y al mismo tiempo crear una fortaleza exterior para evitar ser atacado por la retaguardia (Aunque todo parece indicar que se inspiró en el sitio de Numancia). Todo ello realizado en un tiempo record por sus legionarios mitad guerreros mitad albañiles e ingenieros. Lo que más me ha llamado la atención es el uso de tecnologías muy avanzadas para todos estos trabajos, como fue “minar” los campos para dificultar el ataque enemigo.
Respecto a las figuras, me gusta Julio Cesar con el pelo gris. El nuestro también lo lleva (muy en el tipo del que se representa en los comics de Asterix). En realidad Julio Cesar para esa época era calvo. Sin embargo me gusta representarlo con el atuendo rojo de los legionarios, uno más solamente diferenciado por el peto, y el caballo. Cada uno tenemos nuestra idea en la cabeza. Desde luego nuestro Vercingetorix, lleva un caballo negro y una coleta morena recogida… de la nueva serie de Dragons. Un saludo
¡Uauh! Pues estoy deseando ver ese Vercingetorix :)
ResponderEliminarMuy cierto lo de que en realidad César era calvo. La mejor forma de acercarse a la guerra de las Galias es desde Asterix, porque la peli que hicieron sobre Vercingetorix era bastante floja...
En Francia pude ver la estatua de Vercingetorix en el sitio de Alesia. En realidad toda la historia está idealizada... os lo dice un historiador. Pero como dice Gandalf, si no lo adornamos ¿para qué contarlo?
Gracias y saludos
¡Por Tutatis!