domingo, 8 de mayo de 2022

Diego Velázquez

 

   Diego Velázquez es, en mi opinión, el mejor pintor de todos los tiempos. Aquí le vemos en su taller, dentro de las dependencias de palacio, como pintor de cámara del rey Felipe IV:


    Para ayudarse en su trabajo, Velázquez utiliza un tiento: una vara en la que apoyar la mano con la que dirige el pincel y no tocar el lienzo:



  El rey entra en el taller acompañado por Rubens, que se encuentra en Madrid en una misión diplomática. Además, planea estudiar las colecciones reales para contemplar los cuadros del pintor que más admira: Tiziano. Felipe IV le presenta a su pintor de cámara al pintor más famoso del mundo en aquel momento. Velázquez no disimula su asombro. Conoce bien la obra de Rubens, el artista de más éxito en las cortes europeas, al que numerosos reyes y altos personajes solicitan su labor. Admira el uso de los colores y de la luz del pintor flamenco, así como sus composiciones.



    Pero Rubens queda asombrado también al contemplar los cuadros del joven sevillano. Comenta con él cómo ha logrado la perspectiva aérea en sus cuadros, la luz, la costumbre de Velázquez de pintar "alla prima": sin dibujo previo sobre el lienzo. Rubens sabe reconocer el talento y le comunica al rey que Velázquez lo tiene y mucho. Y le aconseja a Felipe IV que lo conserve como pintor de cámara y que no permita que otros monarcas lo contraten (el propio Príncipe de Gales le había hecho una oferta como pintor de la corte inglesa durante su estancia en Madrid).



     Velázquez y Rubens comentan las obras de las colecciones reales. A los dos les une su admiración por Tiziano. En el estudio de Don Diego, éste le consulta a Rubens sobre técnicas y composiciones. El flamenco le aconseja que viaje a Italia para conocer de primera mano las obras de la Antigüedad y las de los pintores italianos: Miguel Ángel, Leonardo da Vinci, Rafael... Velázquez conoce algunas a través de grabados que le mostró su suegro y maestro Francisco Pacheco



  Rubens no podrá acompañar a Velázquez en su viaje a Italia, pues sus deberes diplomáticos le retienen, pero le aconseja acerca de su estancia allí: qué encontrará, a quién debe dirigirse... Don Diego espera que el rey le confíe una misión en Italia.


2 comentarios:

  1. Buena idea plasmar el encuentro entre estos dos gigantes de la cultura y el arte. La intrahistoria es a menudo más interesante y atrayente que los grandes hechos históricos.

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    1. Es un encuentro que siempre quise recrear. Fue decisivo para Velázquez y además es como si un chaval que sueñe con ser futbolista se encontrase en persona con Benzemá o Messi. Y además Velázquez y Rubens son dos de los pintores que más admiro.

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