lunes, 24 de abril de 2023

La humillación de Canossa

  Castillo de Canossa, norte de Italia, enero de 1077. El emperador Enrique IV del Sacro Imperio se ha enfrentado a la autoridad del papa Gregorio VII. El monarca ha realizado varios nombramientos a obispos sin contar con el pontífice. Para este es toda una afrenta. Empieza así la querella de las investiduras. Gregorio VII reacciona excomulgando al emperador. Este se ve obligado a buscar el perdón del papa. 
    Gregorio VII es invitado al castillo de Matilde de Canossa, duquesa de Lorena y Spoleto. Allí se dirige Enrique IV, descalzo y vestido con un hábito de penitencia, tras atravesar los Alpes:



 El emperador se ve rebajado a esta situación para pedir el perdón del papa. Permanece fuera, sobre la nieve, esperando la respuesta del pontífice:



    Dentro del castillo, Matilde ruega al papa que acepte la penitencia del emperador y que levante la excomunión que pesa sobre él:


Gregorio VII es un líder duro: no puede consentir semejante afrenta contra su autoridad como cabeza de la Iglesia. Enrique IV permanece tres días y tres noches ante las puertas del castillo mientras nieva. Finalmente, el papa accede a perdonarlo. 









2 comentarios:

  1. Como siempre, tremendamente interesantes estos episodios históricos que habitualmente nos muestras.

    Hubieran quedado bien unas antorchas flanqueando la puerta del castillo.

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    1. ¡Gracias! Lo de las antorchas es verdad, pero los chismes que tengo los tengo por alguna parte y no los encuentro. Buscaré :)

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