"Al amanecer del quinto día, al alba, mira al este"
Tal como le había dicho a Aragorn, Gandalf aparece en el sitio señalado portando su vara a modo de lanza. Junto a él van los refuerzos de los rohirrim con Eomer a la cabeza.
Esta imagen de Gandalf es la misma que los guerreros vikingos aseguraban ver durante la batalla: era Odín, montado en su caballo Sleipnir, el corcel de ocho patas, armado de su gran lanza Gungnir.
La imagen del poderoso dios vikingo a caballo no solo inspiró a Tolkien. Siglos antes, durante la Reconquista, los cristianos buscaban su protección en el apóstol Santiago durante la batalla, que cabalgaba sobre un caballo blanco:
En Holanda, Odín pasó a convertirse en el entrañable Sinterklaas (San Nicolás), que visita puntualmente a los niños holandeses cada diciembre, llevando regalos en su caballo blanco...
Te va a parecer una locura, pero estamos intentando nuestra versión de Sleipnir…, aunque está todavía solo en papel, creemos que es posible hacerlo. Muy buena entrada, y qué complicados estos nórdicos con sus personajes mitológicos. Saludos
ResponderEliminarTeniendo en cuenta las increíbles creaciones que nos habéis enseñado no me parece en absoluto una locura ¡Deseando verlo! :)
ResponderEliminarGracias como siempre
Saludos