El señor Bonnacieux

   Con el dinero que le entregó el rey, D'Artagnan ha contratado a Planchet, un criado de Picardía, y ha alquilado una vivienda al señor Bonnacieux. Meses después, éste acude a pedirle ayuda:

-Señor, el señor Bonnacieux desea veros.

-Bien, Planchet, hazle pasar.

-¡Señor D'Artagnan, tenéis que ayudarme!

-Tranquilizaos, señor Bonnacieux. Decid, ¿qué os sucede?

-¡Mi esposa Constance ha sido secuestrada!

-¿Secuestrada? ¡Diablos!

-Veréis, señor. Mi esposa es costurera de la reina Ana y tremendamente leal a ella. Sospecho que hay algún tipo de complot en la corte y desean separar a Constance de la reina y sacarle cierta información, al ser su confidente.

-Lo que decís es cosa seria ¿Sospecháis de alguien?

-Constance habló de cierto caballero que la seguía.

-¿Sabéis cómo era?

-Tenía una cicatriz en la cara.

-¡Es él! ¡El hombre de Meung!

-¿El hombre de Meung, decís?

-Olvidad eso...

-Veréis, señor D'Artagnan. Ya que me debéis algunos meses de alquiler... he pensado que sin duda vos erais la persona idónea para esta tarea...

-Sí, sí, comprendo que queráis acudir a mí... Tendréis noticias mías, señor Bonnacieux. Confiad en mí.