La caja contiene dos figuras que representan a los dos personajes principales del cuadro de La ronda nocturna, la obra maestra del pintor holandés Rembrandt van Rijn (1606-1669), joya del Rijksmuseum y una de las joyas de la pintura barroca. Estos dos personajes son el capitán Frans Cocq (el que viste de negro) y el teniente Willem van Ruytenburgh.
El cuadro, de enormes dimensiones, fue uno de tantos encargos que las compañías militares locales (una especie de policía municipal de la época) encargaban a pintores de renombre. En el caso de Rembrandt, aunque cobró la suma acordada, los miembros de la compañía no quedaron satisfechos por el trabajo y el cuadro fue olvidado en un salón. Con el tiempo fue oscureciéndose por la suciedad y en el siglo XIX se tomó por un cuadro de tema nocturno, por lo que fue rebautizado como La ronda nocturna.
Las dos figuras son bastante interesantes en sí. Lo mejor es la decoración de los torsos de ambos personajes, muy fieles al cuadro, con esas bandas y fajines. Una pieza bastante curiosa es el bastón de mando que lleva el capitán Cocq, que creo (a lo mejor estoy equivocado) que Playmobil no había sacado antes, por lo que estamos ante una pieza inédita. Yo la veo bien también para dioramas del siglo XVIII, tanto como bastón de paseo como de batuta para un concierto.
Pero dos piezas que yo no habría puesto para el capitán son el sombrero y la espada. Cierto que en aquel tiempo se llevaban los sombreros de ala ancha, pero habría sido mejor poner un sombrero de mosquetero que no uno del oeste. La espada, que es la clásica medieval, debería haber sido sustituida por una del XVII:
Del teniente van Ruytenburgh me llama la atención la lanza dorada que lleva: es una lanza de caza, una pieza que no había vuelto a salir desde los años 80.
A pesar de esas piezas creo que son dos figuras que pueden encajar perfectamente en dioramas de esa época y que vendrán genial para los tercios de Flandes y el vacío del tema de los mosqueteros que comenté en la entrada de ayer.
Juan Antonio Moscoso Zurita.
ResponderEliminar¡HOLA OTTOKAR-DIEGO!, aquí estamos repasando tus entradas y en esta no me podía resistir a comentar, los personajes son magníficos (sus torsos), ojala PM sigua con estas entregas y repase también los museos españoles donde innumerables e inmejorables personajes les esperan.
Por otro lado el bastón de mando del capitán también te vale para los optios de las legiones romanas, estos eran el segundo del centurión he iban detrás de la centuria reforzando sus ordenes, y la lanza del teniente creo que se llama estopón, y aquí en España durante los tercios era el distintivo de los de los sargentos, todo esto, claro, si no me falla la memoria ;)....
Gracias y ¡ADELANTE!.
Muchas gracias, Juan Antonio, eres más que bienvenido :)
ResponderEliminarTienes toda la razón, no se me había ocurrido, pero serviría muy bien para las legiones romanas ¡Buen ojo! Otra pieza que estaría bien, y ya que hablamos de los tercios, sería el bastón o bengala de mando de los generales.
¡Saludos!
Diego