Mi revisión de este tema se basa especialmente en las cárceles de las ciudades medievales, que podían formar parte del castillo o situarse en la misma ciudad:
Dos guardias descansan junto a la puerta de la prisión:
Un guardia aparece conduciendo el carro con un nuevo preso:
El preso es encerrado en una celda. Puede desistir de pensar en eso de la "libertad condicional". Casi que eso no se llevaba mucho en la Edad Media...
"La cárcel medieval que sacó en su día Playmobil, la 3445, tiene más utilidad como ampliación de los castillos que como prisión"
ResponderEliminarEn eso consiste precisamente la idea original de playmobil. Que una cárcel medieval de Steck se pueda covertir en un tramo de muralla, en una pequeña fortificación, en el campanario de una iglesia o en lo que sea. Con la desaparición del steck se negó a todo lo venidero esa versatilidad, y de la consecuente evolución del Steck con piezas nuevas.
Ves los edificios actuales de playmobil, tan infantiles y poco verosímiles y se te cae el alma a los pies.
Lo mismo con la especialización de las figuras. El espíritu del juguete era precisamente que una figura standard se pudiera convertir según los accesorios que le colocaras, en un indio, en un obrero o en un caballero. Ahora difícilmente una figura puede cambiar de temática si no es desmontándola completamente y volviéndola a montar con otras piezas de otras figuras.
Normalmente cuando una marca traiciona vilmente sus principios más elementales el batacazo es de órdago (véase el caso Panrico-Donuts)o directamente el cierre.
En playmobil no se ha dado el caso, podría ser por la falta de una alternativa seria o también por la retirada del mercado de las figuras bélicas que pudieran hacer sombra al gigante de Zirndorf.
Exacto. Playmobil siempre orientó todo a la imaginación y el steck fue su mayor creación en ese aspecto. Pero ahora parece que lo de la imaginación ya no les interesa, pues quieren que los niños se compren el castillo entero y que las piezas no valgan para otra cosa. En fin...
EliminarInfantiles es la palabra, dices bien, pero en el sentido peyorativo. Antes para ellos los niños eran seres inteligentes, con imaginación y abiertos a aprender historia. Ahora solo son producto de una sociedad de consumo para ellos...
No puedo estar más de acuerdo.
Me gusta el efecto conseguido superponiendo edificios. Le da una sensación de amplitud mayor de la real. ¡Qué buenas piezas y qué bien quedan esas rejas, muros y puertas! El suelo empedrado ha quedado también muy bien. Muchas gracias por compartirlo.
ResponderEliminarMuchas gracias, Jose
EliminarSaludos