lunes, 16 de enero de 2017

Playmoexclusivos: Alberto Durero

 Dedicando espacio y entradas a aquellas figuras exclusivas de Playmobil, es decir, aquellas promocionadas por museos, ayuntamientos, etc. sobre personajes históricos y artísticos, me ocupo en primer lugar del pintor Alberto Durero (castellanización de Albrecht Dürer/1471-1528). 


       La figura fue el resultado de un acuerdo entre el Museo del Prado de Madrid y el ayuntamiento de Nuremberg, cuna del pintor. La ciudad alemana siempre vio con los dientes largos que la capital española posea una de las obras maestras de Durero: su autorretrato con guantes, en el que está basada la figura. Hoy día lo podéis encontrar todavía en la tienda del Prado. Lo curioso es que siempre dicen que se les van a acabar las cajas para siempre, y de pronto la siguiente vez que vas hay más...

    Por empezar a describir, hasta la caja tiene lo suyo. El fondo (algún día hablaremos de los fondos de las cajas) nos muestra la ciudad medieval de Nuremberg, con sus casas antiguas y una de las torres del castillo, muy cerca precisamente de la casa donde vivió Durero, convertida hoy en museo. La figura combina piezas extraídas de diferentes temáticas. El pelo ha sido hecho curiosamente con una cota de malla medieval teñida de marrón rojizo para aprovechar los bucles que hacen las anillas. Y la verdad es que da el pego (el único caso conocido que yo sepa). El gorro, blanco con rayas marrones, es el clásico de pirata, y la verdad es que no hay otro más apropiado para imitar el del autorretrato.La capa es la que introdujo el tema de Roma, pero que hemos aplicado a otros temas, como Edad Media o vikingos. Precisamente de vikingos son las botas que lleva. El torso es la parte más original de la figura, pues imita al detalle el pecho del pintor, con las cuerdas para atar el traje renacentista. La verdad es que Playmobil ha dedicado poco a los siglos XVI-XVII y esta figura es una verdadera joya para esa época.

   La figura lleva una paleta y un pincel además del caballete donde luce enmarcado ya el autorretrato. A simple vista recuerda bastante a la referencia 5404: el pintor victoriano. Una caja que siempre he querido tener por mi afición al dibujo y la pintura, pero que nunca encontré. Una apuesta decimonónica que serviría para un perfecto París de los impresionistas.
    
     Ha sido un acierto también acompañar a la figura con una mini reproducción del propio autorretrato, tanto para promocionar la obra del pintor como para inculcar el interés en los niños, aunque como toda caja de Playmobil es comprada tanto por estos como por adultos. Y la verdad, junto con os cuadros del pintor de la citada 5404 y los que decoraban la casa victoriana son los únicos cuadros que ha sacado Playmobil (si no me equivoco).
      Imitando al Durero circulan algunas customizaciones por internet de pintores junto a sus obras maestras. Por ejemplo, Diego Velázquez con Las Meninas:


Francisco de Zurbarán con Defensa de Cádiz contra los ingleses:


El Greco con El caballero de la mano en el pecho:


Francisco de Goya con La maja desnuda:


Vincent van Gogh con Los girasoles:


Julio Romero de Torres con La Fuensanta:



Durero fue sin duda el gran maestro del Renacimiento alemán y en mi opinión uno de los mejores pintores de la historia. Niño prodigio como Mozart, a los doce años ya dominaba el grabado y otras técnicas y dibujaba a la perfección el dibujo de anatomía y plantas. 
       

El autorretrato que dibujó a los catorce años

Vivió una época de cambios, en plena eclosión de la Reforma protestante (de la que hablaremos en un próximo post, ya veremos por qué). Aunque admiró a algunos reformistas y tuvo amigos leales a Lutero, Durero permaneció fiel a la Iglesia Católica. Como Rubens fue uno de los pocos pintores que gozó de cobertura económica (y bastante alta) en vida y conoció el éxito. El emperador Maximiliano I le concedió un sueldo vitalicio, el cual confirmó y renovó su nieto y sucesor Carlos V. 
        Durero fue también un innovador. Aunque bebió del arte italiano y fue heredero del medievo alemán, aportó un estilo elegante y minucioso. Fue el primer artista (con el permiso de Leonardo Da Vinci) que se interesó por la naturaleza y plasmarla en el dibujo de modo científico, por lo que se puede decir que fue el inventor del cuaderno de campo. También fue el primero que empezó a usar la acuarela. Otra de sus habilidades fue el grabado, donde destaco El caballero, la muerte y el diablo. Es mi grabado favorito, ya hablé de él en Mad on Playmobil y algún día lo reproduciré con figuras ¡A ver qué sale!

                                                            






         



2 comentarios:

  1. Muy buena referencia Ottokar, Playmobil debería tomar nota de las personalizaciones, que seguro tenían buena salida en diferentes museos del Mundo y fomentarían de paso el conocimiento de muchas maravillas pictóricas. Encantados de ver la representación del grabado, que el caballero está chupado, pero el resto es todo un reto. Un saludo

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  2. Pues sí, es un recurso de promoción bastante acertado y yo creo que otros museos se unirán. Empezó el Prado y ha seguido el Rijksmuseum. Playmobil se está imponiendo cada vez más en publicidad y diseño porque ven que es un producto atractivo y para todos los públicos. Pongo como ejemplos su aparición en anuncios de Gas Natural o Renault.
    A ver qué sale del grabado, tengo mis dudas con el diablo y la muerte jeje
    Un saludo

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